GOBIERNO PROGRESISTA, NO DE IZQUIERDA
- Raúl López Deantes/Moneda y Finanzas
- 27 nov 2018
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El próximo sábado, comienza una nueva era política por Andrés Manuel López Obrador en México y escribirá su propia historia; lejos quedaron atrás 18 años de proyectos y sueños, ahora todo será realidad o la misma realidad avasallará la nueva idea de nación. Como gobierno en funciones gozará de la mayoría en el Congreso de la Unión, Senado, gubernaturas, congresos locales, es decir, tendrá todo a su favor, incluso cambiar con un congreso constituyente una nueva constitución si lo quisiera o simplemente hacer una cirugía mayor a la actual y de recursos económicos ni hablar, serán ilimitados. Con el triunfo de morena, la gente confunde a un partido en el poder que lo encasillan en la izquierda, pero déjeme decirle, que este partido es muy incluyente: hay personas provenientes del PAN que tienen pensamiento de iniciativa privada, personas del PRI que piensan de manera centrista, lo mismo les da aprobar leyes en favor de los más desfavorecidos, qué abrirle la puerta al capital extranjero a través del art. 27 constitucional; incluso, se les unieron de partidos de corte humanista, evangélicos, maestros, ecologistas y finalmente verdaderos luchadores de la izquierda, sin embargo, el proyecto de la cuarta transformación, no permite etiqueta de izquierda, sino progresistas, porque detonarán inversión pública y privada y lo mismo ayudarán a estudiantes, que personas de la tercera edad, sin embargo, lo que distinguirá a este gobierno, es la inversión industrial y no tanto la exportación como en los sexenios pasados; se prevé que el sur-sureste detone y salga del atraso que tiene no sólo de décadas, sino por siglos en pobreza, desempleo y falta de infraestructura; la apuesta es grande, sin embargo, el tiempo apremia, porque seis años es insuficiente; ningún gobierno en su transición había trabajado tanto para tener la mesa lista con acciones y leyes para sustentar su ideario político; reorganizó la administración pública, crearon nuevas Secretarías y le cambiaron el nombre a otras, pero descentralizarán a muchas de ellas, aunque se perfile una centralización en la toma de decisiones; la cancelación del aeropuerto es la apuesta más grande, ya que la presión internacional de los precios del petróleo y lo que sucede en la frontera con los migrantes que quieren pasar a Estados Unidos han hecho que el dólar no deje de subir hasta 20.62; el perdón y olvido para los corruptos, no le cayó nada bien a la inmensa mayoría, pero van a rectificar, porque si no seguirá la espiral de la corrupción en los próximos años. Este fin de semana los mexicanos estrenaremos un nuevo gobierno donde los proyectos están muy claros, pero sigo dudando de sus colaboradores, ojalá me equivoque y mejoren nuestro País.
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